El sector turístico en Guadalajara ha experimentado un auge significativo, y con ello, el crecimiento del alquiler a corto plazo. Muchos han optado por esta vía para maximizar sus inversiones inmobiliarias.
Propiedades en el corazón del centro histórico o cerca de atracciones principales generan altos ingresos por noche desde plataformas como Airbnb y Booking.com. Esta tendencia ha hecho que muchos propietarios reconsideren su estrategia tradicional de compra y mera ocupación.
Sin embargo, no todo es un camino de rosas. Las regulaciones de alquiler a corto plazo están en constante cambio, y lo que parece un negocio próspero puede ser coartado por nuevas leyes restrictivas.
Pese a los riesgos, la posibilidad de obtener ganancias significativas impulsará a muchos a seguir invirtiendo en propiedades con potencial turístico. Pero, el siguiente factor podría ser el mayor catalizador aún no mencionado…